lunes, 22 de noviembre de 2010

Predicar sin el ejemplo

Hablemos de metodologías: activas, participativas, comunicativas, cooperativas, innovadoras, adaptadas, consensuadas, aprender pensar, aprender a ser, aprender a aprender, que despierten la curiosidad, que conduzcan a la reflexión, que contribuyan a generar mentes críticas, bla, bla, bla.
Se ha escrito tanto sobre todo esto que podríamos construir una facultad de educación utilizando las publicaciones a modo de ladrillos, pero...
...¿alguien puede explicarme cuántos profesores, aulas, textos, procedimientos, evaluaciones, horarios, fechas, etc. han conducido a toda esa teoría durante su paso por la facultad?  Veamos, tengo cinco dedos en la mano y me sobran varios, las cuentas no me salen.
Lo que podemos encontrar con más seguridad son clases magistrales a las que se les pone otro nombre cuando se deja que voluntariamente alcen la mano un par de personas para hablar (o balbucear incluso), donde se te dice qué proyectos debes  hacer y cómo, que por supuesto nunca se llevan a cabo porque antes de que te de tiempo a pensarlo se terminó el cuatrimestre, donde sigue  habiendo tarimas en las aulas y por supuesto las mesas siguen siendo pupitres que "fomentan" la comunicación , con tu yo interior. Podemos seguir con la cuenta, pero corremos riesgo de que salga un número enorme y con el signo menos.
Bienvenidos a la facultad donde se hace lo contrario de lo que se dice.

4 comentarios:

Pedagog@ dijo...

Totalmente de acuerdo, me ha encantado esta entrada!

Unknown dijo...

Completamente de acuerdo, es algo que siempre he pensado, mucho hablar de participación, cooperación...necesidad de cambio, y al final nadie lo pone en práctica, yo puedo decir que de los años que llevo en la facultas, sólo tres profesor@s, lo han hecho.

Este Blog me parece uan buena iniciativa, adelante!!

Sobrino dijo...

Estoy de acuerdo con lo que dices, pero también pienso que muchos profesores nos preguntas cosas para participar en clase y nosotros, en la mayoría de los casos, no decimos nada.

Si queremos ser escuchados, ser activos, participativos, etc, etc. debemos empezar por participar en clase y no tener miedo.
Aunque también es verdad que las clases magistrales que nos ofrecen muchos profesores no ayudan.

Y porsupuesto que este blog es una gran iniciativa. Pronto haré una entrada.

Anónimo dijo...

Sobrino estamos esperandote!